By Miguel Hernandez
(Escucha el audio en Español y Mixteco, variante de Guadalupe Nundaca, 5 min)
Durante esta temporada de regreso a clases, el Proyecto Mixteco indígena o (MICOP por sus siglas en inglés), una organización sin fines de lucro, distribuyó más de 1,000 mochilas llenas de útiles escolares en Oxnard, Santa María y Paso Robles para ayudar a la comunidad indígena. La larga lista de útiles escolares que las familias deben comprar para el regreso a clases crea una gran ansiedad para las familias trabajadoras del campo que a menudo son de escasos recursos.
Para ayudar a aliviar estas necesidades económicas y alimentarias entre la comunidad de trabajadores agrícolas indígenas, MICOP organiza una distribución anual de mochilas y una distribución mensual de alimentos titulada “reunión mensual” donde se dan bolsas de comida, pañales e información acerca de programas de ayuda para la comunidad.
El motor y el corazón detrás de estas iniciativas es la directora de programas de MICOP, Norma Gómez, quien compartió cómo MICOP ha estado organizando estas distribuciones de mochilas por más de 15 años y como surgió como una respuesta directa a las necesidades de la comunidad que expresaban su necesidad de un servicio como este.
Gómez compartió cómo inicialmente, cuando la organización empezó, hablaban directo con la comunidad y preguntaban cuáles eran los retos más grandes que se enfrentaban, y el regreso a clase siempre era uno de esos.
Gómez también compartió lo esencial que este recurso es para la comunidad porque “en temporada de regreso a clases, el trabajo en el campo tiende a bajar, y para familias grandes se les hace muy difícil comprar útiles para todos”
En Oxnard, 600 mochilas fueron distribuidas y cientos de familias hicieron fila con anticipación y entusiasmo para recibirlas. Muchas de las familias que participaron expresaron su agradecimiento con la organización por los esfuerzos que hacen para ayudar a una comunidad que comúnmente es olvidada e ignorada.
Gómez también compartió que una de las metas más grandes para ella es “que todos los niños tengan sus mochilas nuevas para el año escolar, y que no haya ningún niño de nuestra comunidad que se quede sin mochila”. Gómez también compartió lo importante que es para los niños tener una mochila nueva para empezar el año. Es un privilegio que no todos los niños de la comunidad indígena pueden tener. Finalmente, Gómez expresó lo orgullosa que se siente al poder traer cambio y alivio para su comunidad.
En fin, Gómez con entusiasmo y optimismo compartió que a ella le gustaría que hubiera “más apoyo para la distribución de mochilas, mayores fondos económicos para poder ofrecer mochilas de mejor calidad para brindar mayor satisfacción y mejor servicio a la comunidad indígena migrante”.